lunes, 16 de septiembre de 2013

Lo primero es presentarme, me llamo Seimon y mi pasión por la cerveza viene  desde muy pequeño, me imagino que por herencia genética, sangre alemana que fluye por mis venas.
La típica historia, padre emigra a Alemania como buen emigrante con maleta y gallina bajo el brazo, con contrato de trabajo, ni idea del idioma oficial del país y con ganas de ganar pasta y ver mundo, comienza la aventura.
Conoce a mujer autóctona del país, queda prendado de ella y bajo su influjo,se enamoran, se casan, tienen hijos y vuelven a la península, concretamente a Bilbao, por trabajo, les parece un buen lugar donde echar raíces.
Nazco yo, por fin el varón deseado, mi padre ya puede echar el freno, después de tanta mujer por fin llega su vástago, es lógico, la perfección cuesta encontrar.
Así que vivo mi vida con la influencia de dos culturas, dos idiomas,dos maneras diferentes de ver la vida, siempre fusionando las dos culturas.
Mi padre me dio a probar mi primera cerveza, en principio solo me dejaba pasar el dedo por la espumita y me decía :"Cuando tengas edad suficiente te beberás con tu padre una cerveza entera, hasta entonces conforma te con la espumita".
Error, fue pasar ese néctar de los dioses por mis labios y siglos de cultura nórdica activaron mis instintos mas primarios,cerebro reconoce esa bebida y sabe que por legado mi mente y cuerpo crean un estado de simbiosis que invita a la cerveza a formar parte de mi vida .
El raro de la cuadrilla que siempre bebía cerveza ya que en mi época adolescente el 99% bebía Kalimotxo y la cerveza todavía no estaba tan en auge como ahora.
Mi idea es la de que la cultura cervecera se extienda por esta nuestra ciudad, que la gente comience a ver que la cerveza  es rica en nutrientes y que se puede beber y acompañar con todo tipo de viandas, no solo como costumbre de bares.
Diferenciar entre una buena cerveza y una que bebes porque es la que tienen en la tasca de debajo de casa, que la gente descubra nuevos sabores y sensaciones.
Aquí la costumbre es asociar el yantar con el vino, carne con tinto, pescado con blanco, no bebemos cerveza porque nos llena, no pega, eso es porque no nos ofrecen la cerveza que hace un buen maridaje con esa comida, romper barreras y abrir la mente a todos esos que aun les queda un hermoso mundo por descubrir.
Esa sera mi misión, ahora ya se cual es mi propósito en la vida, es darle al populacho otra salida, para gustos los colores y para cada momento su cerveza.

La palabra "brindar" se deriva del italiano brindisi, que a su vez proviene del alemán Ich bring?dir?s: "te lo ofrezco".

Así que yo os lo ofrezco, mi sabiduría y mi conocimiento esta a vuestros pies.

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